Nuestra respuesta a la COVID-19

Cuando tu trayectoria profesional se desarrolla en el ámbito de los bienes de consumo, la mayoría de las personas piensan que tus recuerdos favoritos provienen de campañas de marketing atractivas o lanzamientos de grandes innovaciones. Aunque he vivido gran parte de estas experiencias emocionantes, puedo decirles que la mejor parte de estar en este negocio es conocer a las increíbles personas que hacen que todo suceda.

Si este año ha demostrado algo, es que debemos estar especialmente agradecidos por aquellos que se mantienen a sí mismos y a los demás seguros, saludables y enfocados en hacer lo esencial. Personas como Marshell en Carolina del Norte, Lindiwe en Sudáfrica o Andrey en Rusia.

Estos son solo tres de los miles de trabajadores esenciales, a los que consideramos héroes, en las instalaciones de fabricación, distribución y servicio de Kimberly-Clark en todo el mundo. Su atención garantiza que el mundo tenga los productos que necesita todos los días. Ustedes hacen que la comodidad, la salud y la dignidad sean posibles para miles de millones de consumidores cada día. Empoderan a mujeres y niñas y crean soluciones sanitarias esenciales que el mundo nunca volverá a dar por sentado.

A todos nuestros equipos de todo el mundo, quiero decirles que lo que más extrañé este año fue visitarlos a ustedes, las personas cuyas manos y corazones hacen posible que las vidas y el mundo sean mejores.

Para mí, 2020 siempre será mucho más que un año marcado por la COVID-19. Será un año en el que vimos a las personas que nunca querían ser el foco de atención destacarse y brillar. Ustedes son la mejor parte de lo que hacemos, y me enorgullece ser, al igual que ustedes, miembro de la familia K-C.