Redefinir el liderazgo en el suministro de fibra responsable para la próxima década
Hace más de una década, Kimberly-Clark lanzó una política de adquisición de fibra líder en la industria que buscaba minimizar nuestro impacto en los bosques del mundo. Nos centramos en dos estrategias:
Hemos hecho progresos significativos en ambas áreas, pero reconocemos los desafíos que plantean la doble crisis del clima y la biodiversidad. También sabemos que la huella de nuestras fuentes de fibra se superpone a las comunidades que se verán afectadas de manera desproporcionada por el cambio climático y la pérdida de biodiversidad: las comunidades indígenas y las comunidades que dependen de los bosques para su subsistencia. Por eso, con vista al futuro, estamos alineando nuestras ambiciones para 2030 a fin de abordar también estos temas.
Creemos que la certificación del FSC® aplica los criterios más rigurosos para la conservación de la biodiversidad y la protección de los derechos de las comunidades indígenas. Estas son dos razones importantes por las que la fibra virgen certificada por el FSC® es la única fibra virgen que consideramos una fibra preferida por el medioambiente y que permite contar para nuestro objetivo de 2025. Continuaremos mirando más allá de nuestro compromiso con el FSC® para encontrar formas adicionales en que Kimberly-Clark pueda apoyar el bienestar y los derechos de tenencia de la tierra de las comunidades indígenas y otras comunidades dependientes de los bosques que están subrepresentadas dentro de nuestra esfera de influencia, y al mismo tiempo proporcionar beneficios para el clima y la biodiversidad.
Por último, nuestros esfuerzos en curso para reducir nuestro uso de fibra forestal natural procedente de bosques de alto valor de carbono y aumentar nuestro uso de fibras ambientalmente preferidas, como las fibras alternativas y recicladas, seguirán siendo herramientas importantes para reducir nuestra huella de carbono forestal.
Descargue más información sobre nuestro programa de Huella forestal.